La biblioteca de Chillarón de Cuenca clausuraba los talleres de lectura con gran éxito el pasado viernes.
Las actividades organizadas por la biblioteca para clausurar los talleres de lectura de esta temporada fueron todo un éxito. Unos talleres de lectura, cuatro en total, que se desarrollan durante todo el año, con un proyecto en común, y a los que acuden semanalmente más de cincuenta personas.
Este viernes acudían a la biblioteca todos los clubes y los talleres de lectura, los peques con sus padres, con el objetivo de juntarse y celebrar actividades en familia. Una biblioteca que se quedó pequeña con más de 90 asistentes a este acto.
Varias fueron las actividades realizadas:
Una presentación, creada por nuestra bibliotecaria, con el trabajo realizado por los miembros/as de los clubes y los talleres de lectura en su proyecto: La Agencia Federal de Detectives Literarios DUDI.
Entrega del Carnet de Detective Literario personalizado y con foto para cada miembro que ha participado activamente en el proyecto.
A continuación se entregaron los premios MicroVioletas por la igualdad. Un certamen organizado por el Ayuntamiento y la biblioteca de la localidad, y financiado con cargo a los créditos recibidos del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, a través de la Secretaría de Estado de Igualdad.


Paula Castro fue la ganadora del Premio Monopoly Lector. Un juego de azar que realiza la biblioteca durante el año, en el que se premia no sólo al mejor lector/a, sino al que consigue solventar más obstáculos en diferentes lecturas.

La actividad «La llave de la igualdad», que nos propuso la bibliotecaria, aunaba la igualdad con el proyecto de detectives literarios que se realizan en la biblioteca. Una actividad divertida, amena, pero que hizo pensar y dar muchas vueltas a la cabeza de los Detectives Lectores hasta llegar a su resolución.
Fue una tarde muy emotiva, donde las palabras emocionadas de un Alcalde, Vicente Reyes Martínez, que reconocía la gran labor de la bibliotecaria, Guadalupe Vázquez Corrales, dejando claro que el éxito de la biblioteca es exclusivamente consecuencia del trabajo, el esfuerzo y la implicación de ella.

Los padres sorprendieron a Guadalupe Vázquez, la bibliotecaria, y Andrea Serrano, responsable del plan de conciliación, con palabras de agradecimiento por el cuidado y atención a sus hijos/as y dos bonitos obsequios. Ambas, emocionadas, agradecieron el detalle y confesaron el cariño incondicional que procesan por los niños y niñas de nuestro pueblo.
Para terminar la tarde el Ayuntamiento ofreció un piscolabis en la placeta, donde se comió, bebió, pero sobre todo se disfrutó y hubo muchas risas.

Una tarde llena de emociones, alegría y disfrute. Una tarde donde la biblioteca Espido Freire de Chillarón de Cuenca dejó patente que es una biblioteca viva y activa.